La experiencia de estar con l@s alumn@s en un espacio físico que no sea el aula permite conocerlos de una manera diferente, relacionarse con ellos con mayor espontaneidad y soltura. Permite asimismo que ell@s conozcan a su profesor/a en una dimensión distinta.
La situación formal da paso a la situación informal. En ese sentido cambia el lenguaje y al cambiar el lenguaje cambia la forma de relacionarse y de conocerse
Las salidas pedagógicas son una fuente inagotable de aprendizaje, para l@s chic@s y para sus profesor@s, desarrollan la autonomía, la capacidad de observación, la empatía, la capacidad para organizarse, los lazos entre ell@s, y todos los conocimientos que se adquieren en cualquier espacio cultural donde se decida ir.
Claro está que tanta actividad pasa factura...
o no deja ni huella en los incansables